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| La Carta Esférica
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| por Francisco J. Vázquez
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El mar está lleno de tesoros, de mercancías y barcos que alguna vez los hombres se atrevieron a intentar trasladar por sus dominios y que, en más de una ocasión, éste se encargó de guardar y vigilar una vez que los humanos fracasaron en su empeño. Tesoros que con el tiempo, al amparo de leyendas ya olvidadas, canciones tergiversadas y documentos extraviados, reclaman ser recordados con el pasar de los años por aquellos que creen que la fortuna no está reñida con el avance de los tiempos. Y es que aún existen cazadores de esos tesoros que un día, por las causas que fuere, acabaron reposando sobre las tranquilas y gélidas aguas de los mares.
"La Carta Esférica" es un libro de aventuras. Una maravillosa novela en la que el lector se sumergirá en hazañas cargadas de emociones diferentes y únicas, acompañando a unos personajes que se desenvuelven en unas localizaciones y a través de unas situaciones totalmente hilvanadas por la genialidad de la pluma de Arturo Pérez-Reverte. En esta trama hay elementos importantes como son el mar, el amor, el corazón o el dinero que, pese a ser tan diferentes y aparentemente alejadas entre sí, en "La Carta Esférica" son piezas claves de todo lo que acontece.
La novela de Arturo Pérez-Reverte no puede dejar de ser leída. Poco menos que es imprescindible. Y desde luego, una vez comenzada es de esas obras que uno lee del tirón, porque envuelve al lector de tal manera que no podrá dejarla hasta que la última palabra aparezca ante los ojos de quien se sumerge en las profundidades de la historia.
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