| Toda historia tiene un comienzo, ¿recuerdas el momento en el que la historia de marina empezó a ser una historia?
La historia nació a orillas del Cantábrico, durante un viaje que hice a San Sebastián con unos amigos hace unos cuantos años. Al regresar, anoté la primera frase de la novela “Yo quería tener una casa frente al mar”. Y allí se quedó durante mucho tiempo. De vez en cuando volvía a ella intentando encontrar la historia, que yo sabía que estaba ahí, hasta que un día vi claramente al personaje de Marina y me senté durante meses a escuchar lo que tenía que contarme.
Marina es una mujer independiente, moderna, sensible... ¿en qué crees que se puede ver reflejado un porcentaje de población femenina?
Yo creo que en muchos aspectos. Cada vez hay más mujeres que viven solas porque lo deciden y además lo disfrutan. Mujeres económicamente independientes, que participan en todo tipo de actividades solidarias, culturales y deportivas, y todo ello sin renunciar al amor ni al sexo. Mujeres que con o sin hijos, no quieren vivir en pareja. Algunas porque no encuentran el hombre adecuado y no necesitan conformarse por razones económicas como antaño. Muchas de ellas vienen de fracasos rotundos en parejas que no funcionaron. Esas, a diferencia de los hombres, que rápidamente buscan y entran en otra convivencia, no suelen repetir y mantienen la sabia actitud de "tú en tu casa y yo en la mía”. Por lo general no vuelven a vivir con otro hombre, o al menos durante mucho tiempo.
El deseo es parte del título y parte fundamental en la obra, pero ¿qué significa para ti el deseo? seguro que tienes "alguno inconfesable...".
Creo que en la novela los deseos son sinónimo de sueños. Para mí lo significan todo. Arrastrarse por la vida sin sueños e ilusiones es terrible. Sería mejor tirarse por una ventana que vivir así. Yo tengo muchos deseos, pero los inconfesables son inconfesables y suelen ser bastante cochinos. No, la verdad es que me siento bastante realizada y creo que todos los que siguen ahí, resistiéndose, podría contártelos, pero eso se hace mejor en la barra de un bar con buena música de fondo.
El laberinto, el minotauro, ariadna y teseo... ¿el laberinto donde se mueve marina tiene alguna relación con el mitológico?
En realidad no, o al menos no intencionadamente. Pero siempre se pueden buscar paralelismos, la mitología es parte de nosotros, de nuestros sueños y miedos, que son universales y atemporales. En la actualidad la vida laboral a veces se convierte en nuestro laberinto particular, la mayoría gastamos una gran parte de nuestro precioso tiempo haciendo algo que no nos gusta para ganarnos la vida, nos enredamos en comprar casa, pagar hipotecas, etc... y quedamos atrapados en un laberinto del que no hay forma de salir. Cuando te descuidas te has metido en un enredo en el que ni siquiera cabe el heroísmo de una muerte digna frente al Minotauro. Para la mayoría el hilo de Ariadna sólo aparece con la jubilación. Una faena todo ello.
¿Crees que la sociedad actual propicia los laberintos emocionales? ¿por qué?
Sí y pienso que más para la mujer. Siempre nos toca la peor parte. La mujer hoy en día tiene que elegir entre su vida profesional y la laboral. Renunciar a una carrera profesional ambiciosa y absorbente en la que además tienen que demostrar veinte veces más valía que sus compañeros masculinos o renunciar a la vida familiar. Porque por desgracia la carga familiar sigue estando mayoritariamente en manos femeninas. Estoy hablando, por supuesto, de sociedades como la nuestra, supuestamente avanzadas, porque si hablamos de países menos desarrollados la mujer sigue siendo una auténtica esclava. Centrándonos en España, creo que aquí los chicos también lo están pasando mal porque tienen que encontrar su lugar en un nuevo modelo en el que ya no se sienten emocionalmente seguros. Han dejado de ser el gran–hombre–proveedor para pasar a ser el compañero y eso supongo que impresiona y tendrán que ir dejándose querer por lo que en realidad son y no por la seguridad que puedan ofrecer como ocurría en otros tiempos.
Marina es una observadora nata: contempla, analiza, siente, descansa en la observación del mundo. es un rasgo muy de escritor. ¿observas como marina?
Siempre he dudado si uno se hace escritor porque es observador y necesita contar lo que ve o si se vuelve observador por ser escritor. De cualquier forma Marina tiene mucho de mí, claramente.
¿Qué hay de esther en marina? ¿y qué ha quedado de marina en esther?
Le he prestado muchas cosas a Marina, en especial mi visión del mundo. Le he prestado una ventana, un orangután que medita y sobre todo mi experiencia en una multinacional en crisis. El resto le es propio, toda la historia es suya, no hay nada de autobiográfico. De Marina en mí... pues un poso de profunda gratitud, me ha enseñado a ser paciente, porque una novela requiere una paciencia infinita.
Dentro de toda la obra el humor es un elemento constante. la ironía nos coloca frente a un espejo... ¿qué se ve? ¿qué ves tú en ese espejo de ironía y humor?
A veces nos tomamos demasiado en serio y hay que soltar tanta tensión y reírnos de nosotros mismos. Al fin y al cabo estamos aquí por un tiempo que tiene caducidad y por muy ceñudos que seamos nos vamos por el mismo agujero que el resto. Si se rieran un poco de ellos mismos (no de los demás, que eso ya lo hacen) muchos de los individuos que manejan los hilos de este mundo no serían tan ambiciosos y sinvergüenzas.
| "Siempre he dudado si uno se hace escritor porque es observador y necesita contar lo que ve o si se vuelve observador por ser escritor." |
Utilizas el tiempo y lo desfragmentas, tiempo roto y recompuesto narrativamente por el lector. ¿por qué esa disposición presente¶pasado? ¿qué te hizo componer así la trama?
Una de las cosas que vi con claridad desde el primer momento es que La Utilidad De Los Deseos era una novela sobre el día a día de Marina. En la historia, las rutinas y las pequeñas cosas de cada día adquieren una cierta dignidad, creo que lo merecen porque de eso está realmente hecha la vida. Además, en ese día a día todos arrastramos nuestro pasado, a veces obsesivamente, en especial si hay hechos que han dejado una huella profunda como le ocurre a la protagonista. De modo que en la novela, de una forma natural, Marina va recomponiendo su ayer para entender dónde está hoy y poder mirar al mañana
El amor. tema tratado de diferentes formas: el amor rutinario en el novio de toda la vida, el amor pasional y dependiente en eduardo, el amor por el pececillo, un amor tierno y virginal, el desamor. amor en mayúsculas en toda la obra... ¿qué clase de amor busca marina? ¿crees que la mayoría coincidimos en esa búsqueda?
Me parece que entre lo que busca y lo que encuentra hay una diferencia enorme. Ya he dicho antes que hay en Marina una evolución a lo largo de la novela. De alguna forma lo que busca creo que sí lo buscamos todos, el amor erótico, pleno y sincero, pero es algo muy difícil de encontrar y cuando se encuentra tiene una duración muy limitada. Por eso la mayoría, Marina incluida, a la larga centramos nuestro amor en lo próximo, en lo que sí tenemos, en los amigos, la familia, en las cosas que hacemos y en nosotros mismos.
La comida: tortilla de espárragos, ensalada campera, paella, zanahorias cubiertas de mantequilla, gambas a la plancha... cada parte del tiempo presente tiene un final culinario. ¿qué representa en la obra?
Como te decía antes, la novela trata de lo cotidiano y nada marca más nuestros ritmos vitales que la comida, sobre todo a los españoles, que nos gusta tanto comer y no es de extrañar con los manjares que se guisan en este país. Una paellita... ¡Uhm... qué rica!.
La pintura: klimt, la cubierta, el amarillo, el pez... ¿piensas que marina podría ser una mujer de cuadro de klimt?
Klimt es un pintor que a mi me llega mucho. Las mujeres de sus cuadros tienen un algo de ingenuo y de pícaro a la vez que me parece extraordinario. Creo que Marina tiene mucho de las dos cosas, y también tiene un pececillo enredando dentro de ella.
¿A qué personaje de ficción invitarías a cenar una noche de verano?
A Merlín para que me descubriera los oscuros secretos de la magia y a Aragorn de EL SEÑOR DE LOS ANILLOS para..., bueno no te voy a contar para qué.
Una pista sobre tu nueva obra...
Que muy pronto verá la luz, por cierto. En esta ocasión se trata de un libro de cuentos y sólo puedo decir que en ellos también hay muchos deseos.
Una utilidad soñada, deseos por cumplir.
Muchos, por suerte. Yo me ilusiono con muchas cosas. Soy también un poco ingenua y sueño con un mundo sin banderas, ni fronteras, ni fanatismos. Sueño que la humanidad deja de ser tan antitolerante, egoísta e ignorante. Y que algún día, que nosotros no veremos, pero que llegará, al fin alguien podrá construir un mundo mejor donde quepan todos. Me ilusiona ir a ver a los Stones dentro de un par de meses y me ilusiona salir este puente a conocer otro rincón de nuestro hermoso país. Sueño con cosas grandes y cosas pequeñas. Como por ejemplo, ahora mismo estoy ilusionada porque me está esperando una cervecita con una tapa riquísima...
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