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| Viajeros Por Andalucía
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| por Francisco J. Vázquez
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Que Andalucía es una tierra que siempre ha fascinado a propios y extraños no es algo que pille a nadie por sorpresa. Pero no es menos cierto que pocos son los que conocen los nombres de aquellos que con sus recorridos por nuestra maravillosa región le dieron fama más allá de sus fronteras, haciéndola no sólo conocida, sino admirada y deseada.
Y esa ha sido la labor que se encomendó el prolífico escritor Jesús Ávila Granados en su obra "Viajeros Por Andalucía", un libro en el que se encarga de recoger y dar a conocer los nombres, lugares y referencias que estos viajeros ilustres dejaron sobre una tierra, la andaluza, que es lugar de sueños, leyendas, monumentos singulares y gentes que dejan huella. Porque Andalucía es así... única.
Resulta curioso comprobar como Jesús Ávila Granados ha buceado en decenas de fuentes para desvelarnos los pasos que trajeron aquí a estos grandes personajes, y sobre todo saber qué circunstancias traían y cuáles fueron las que se encontraron a su llegada.
Así, por ejemplo, el lector podrá orientar sus ideas sobre la visita que nos hizo el escritor y político norteamericano Washington Irving en 1826, gracias al cual los americanos descubrieron la belleza de una puesta de sol en Granada, así como las leyendas y misterios de la ciudad que dejó reflejados en su imprescindible "Cuentos De La Alhambra". También su peculiar viaje que le llevo desde Granada a Málaga a través de la costa, de ésta a Ronda (donde se fascinó con el tema de los bandoleros y su mitología alejada de la realidad cruenta), o incluso su visita a la "Tacita de Plata", de la que llegó a afirmar que "Cádiz es la ciudad más hermosa que he visto". De allí partió remontando desde el Puerto de Santa María el Guadalquivir hacia Sevilla, y fue en la capital donde se quedó prendado de su cultura y sus gentes. No en vano fue para una semana y permaneció allí más de un año.
Otro singular personaje que quedó hechizado por Andalucía fue Gustave Duré, uno de los más grandes dibujantes e ilustradores de la Europa del XIX. Todo lo relacionado con Al-Andalus le fascinaba, especialmente lo relacionado con la caída del reino nazarí granadino y el tema de los bandoleros de las serranías andaluzas. Siempre afirmó, hasta su muerte en 1883, que si bien París era su ciudad a la que todo se lo debía, fue sin duda en Andalucía donde pasó los mejores momentos de su vida.
Otros muchos, como George Borrow, Gerald Brenan, Ernest Hemingway o William Jacob, por citar unos pocos nombres, pasearon sus figuras por los caminos del sur de la Península y reflejaron en sus disciplinas el color, el olor y el sentir de una tierra milenaria y orgullosa de ser un crisol de culturas. Sus gentes, sus paisajes, sus monumentos, su clima... ¿qué más se puede pedir de un lugar que para muchos siempre fue un pedazo del paraíso en la Tierra?
Jesús Ávila Granados ha realizado un excelente trabajo en "Viajeros Por Andalucía". Cargado de imágenes, de documentación escasamente conocida, y mezclado con el buen hacer de este genuino escritor, la obra es una guía excepcional que no defraudará a aquellos que sientan cierto interés por saber qué dijeron, quiénes y cuándo sobre Andalucía, sus gentes y sus dominios.
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