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Tormenta
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por Juan Carlos Eizaguirre
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Lincoln Child es todavía un escritor con poco currículum. Sin embargo, en la novela que nos ocupa, da muestras de ser un narrador con futuro. Más por su capacidad imaginativa y fabuladora, que por su estilo, tipo best seller o thriller, con unas cadencias, tiempos y retrato de personajes muy similar a cualquier novela de este estilo. Pero TORMENTA tiene la capacidad de atraer al lector y fascinarlo por las descripciones del mundo submarino, el dominio de la terminología científica y el suspense junto a la acción trepidante.
Estamos, por tanto, ante un thriller científico o novela de ciencia ficción muy bien argumentada y razonada. Si a eso se le añaden los condimentos propios de este estilo de obras, el lector se encontrará ante un libro que le atrapa y del que no se podrá despegar.
Decir que el estilo es sencillo, es a la vez una crítica negativa y positiva. Quiero decir que es una novela para todos, incluso para los que no están acostumbrados a leer mucho.
Este verano TORMENTA puede ser una refrescante novela submarina para toda la familia. Enseguida se conectará con el doctor Crane, principal protagonista, y con un largo reparto de personajes, sumidos a tres kilómetros de profundidad en una grandísima cúpula de doce pisos, habitada por científicos, personal de mantenimiento y militares.
En principio el secreto es la posible localización de la Atlántida. ¿Pero qué hacen tantos marines y sus jefes custodiando todo movimiento? La verdad es que se encuentran ante lo desconocido, ahondando en el fondo submarino unos centenares de metros. La gente que puebla la cúpula comienza a sentirse enferma. ¿Qué es lo que pasa? El almirante al mando no parece ser la persona más dotada para dirigir una posible crisis.
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