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Reptilia
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por David Yagüe
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En lo más profundo del África Negra, aún en la época de los satélites, los GPS y demás adelantos, hay zonas inexploradas y misterios profundos. Esa es, básicamente, la premisa de Reptilia del alemán Thomas Thiemeyer, donde una expedición compuesta por un científico genético británico, una bióloga congoleña y dos cazadores australianos, uno blanco y otro aborigen, parten a una recóndita región del Congo. Su misión: descubrir si la leyenda local del Mokéle m`Bembé es, en realidad, un dinosaurio que sobrevivió a su época. Por supuesto, la cosa no va a ser tan fácil. Una expedición anterior ya intentó lo mismo y desapareció dejando una misteriosa cinta donde se ve una enigmática criatura atacando el campamento. Y la líder de aquel grupo es la hija de la adinerada mujer que financia el viaje y el primer amor del científico británico, pariente más cercano de la rata de laboratorio que del león africano. A pesar de ser alemán Thiemeyer recoge la estela de los thrillers de aventuras anglosajones, al más puro de Child y Preston o Michael Chriton (a cuyo Parque Jurásico cita uno de los personajes del libro diciendo que el final no le convencía). La historia tiene acción y adrenalina, personajes sintéticos, algún toque romántico, parajes exóticos y algunas explicaciones científicas aptas para todos los públicos. Reptilia, un best-seller en Alemania y Holanda, juega conservadoramente dentro de los cánones del género y ofrece una historia sin más pretensiones que la de entretener que se lee a toda velocidad. No ofrece menos de eso, pero tampoco se le debe pedir más. |
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