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Matar y guardar la ropa
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por David Yagüe
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A Carlos Salem hay poco o nada que reprocharle en su corta trayectoria como novelista: si con Camino de Ida, su primera obra, nos ofreció una delirante y refrescante aventura por el desierto marroquí con final en Madrid, en Matar y guardar la ropa se supera a sí mismo y deslumbra con un thriller divertidísimo, bien construido y maravillosamente bien escrito.
En esta segunda novela, el autor nos sitúa en un camping nudista de Murcia donde se dan cita un grupo de personajes bastante curioso: dos asesinos a sueldo de una empresa ultra secreta, uno de ellos su protagonista, los hijos del mismo, su ex mujer que sale con un juez de la lucha anti terrorista, un viejo con nombre de escritor de novela negra, y otros personajes a cada cual más divertido y mejor construido.
La trama engancha desde el principio: uno de los asesinos a sueldo de vacaciones recibe un pequeño encargo en su periodo estival. Debe marcar un objetivo para que sea asesinado pero pronto sospecha que, o el objetivo es su ex mujer o él mismo.
Salem logra trenzar un enredo efectivo que encaja como buena novela criminal y lo adereza con un humor negrísimo (y muy, muy divertido) que ya es marca de este autor. E incluso se puede entresacar cierto mensaje vitalista (como ya ocurriera en Camino de Ida).
Todo resulta notable o sobresaliente en esta novela: la construcción de personajes, el estilo, la estructura… Y se convierte en una novela refrescante (por algo más que por estar ambientada en un camping nudista) que hará disfrutar de lo lindo a todo tipo de lectores.
FUENTE: BEST SELLER ESPAÑOL [comentario cedido].
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