|
| La Orden De Calatrava
|
| por Francisco Contreras Gil
|
|
Comenzó su andadura en un pequeño territorio hostil y semipoblado y, en el discernir de los siglos, sin dejar de guerrear, obtuvo importantes propiedades tanto en extensión como en valor económico. Se expandió por varias zonas de la Península Ibérica, incluso Portugal; su poder e influencia fueron enormes, en especial en el conocido como Campo de Calatrava, y fue tan necesitada como temida por los reyes...
La Orden de Calatrava, escrito por Jesús de las Heras y publicado por la Editorial Edaf es una obra que sumerge al lector, cuando se cumplen 850 años de su existencia, en la historia de la primera orden religiosa-militar creada en España y en una de las primeras en Europa en defender la cristiandad frente al empuje bélico del Islam.
Trescientas veintiséis páginas en las que se describe, de forma excepcionalmente documentada, como fue fundada la ciudad-fortaleza de Calatrava en el siglo XII después de que los templarios no se vieran con coraje suficiente para defenderla frente a los ataques musulmanes. En el tiempo en el que el abad Raimundo de Fieto (Navarra) y Diego Velásquez, monje de sus monasterios, se ofrecen voluntario a Sancho III para hacerse cago de la fortaleza.
Un ensayo histórico que nos sumerge en la parte más desconocida de la Orden de Calatrava desde que Fernando el Católico, a finales del siglo XV, decide controlarla y, tras conseguir ser nombrado maestre, la anexiona a la corona. Desde entonces, los reyes españoles, como grandes maestres, han administrado, vendido e hipotecado los bienes de la orden, desde las minas de Almadén hasta un sinfín de prebendas y de territorios que, en el siglo XIX, fueron definitivamente desamortizados.
'La historia de la Orden religioso militar de Calatrava, de signo cristiano, que nace y crece en la edad Media y permanece activa hasta el siglo XIX, está marcada por ese carácter religiosomilitar (mezcla de espiritualidad, violencia y mercantilismo) que impone su criterio por la fuerza y justifica incluso los actos más bárbaros. Tal carácter no nace en un instante, como por arte de magia, sino por un proceso religioso-cultural a través de siglos. En el ámbito cristiano, las órdenes religiosasmilitares medievales tienen su germen en el movimiento monacal iniciado y desarrollado en Egipto en los primeros siglos (III y IV) del cristianismo, al cual s sumó el fuerte poder religioso y económico ya alcanzado por la Iglesia católica. Los primeros ermitaños cristianos fueron seguidos por otros y formaron diferentes comunidades y órdenes religiosas. En la Edad Media, algunas de esas órdenes, por razones socio-político-religiosas, añadieron a su naturaleza religiosa un carácter militar para luchar contra los ejércitos árabes imbuidos de una nueva fe religiosa, la islámica, que también deseé muy pronto utilizó la guerra para expandir su credo y su dominio. Así, el enfrente cristianismo-islámico influyó en la formación de la Europa medieval -madre de la Orden de Calatrava- influyeron sobre todo tres causas: la división del Imperio romano (que llevó a un nuevo orden mundial), el auge de la Iglesia Católica y del desarrollo monacal (que obtuvieron gran poder) y la ciudad de Jerusalén (elemento sagrado para las tres religiones monoteístas por ser lugar donde sucedieron hechos que las tres religiones consideran clave de la relación entre dios y el hombre)'
Jesús de la Heras -licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid, antiguo redactor del Diario de Cuenca, así como de la dirección del Diario de Albacete y reportero de investigación en el periódico El País, autor además de obras como La españa de los quinquis, El último año de Franco o El caso Mestre- rubrica y recrea en este trabajo desde el arte cisterciense, la batalla de las Navas de Tolosa, la disputas entre Pedro I El Cruel o el Justiciero y las artes nigromantes del maestre Enrique de Villena
Un libro indispensable para todos aquellos amantes de la historia.
|
|
