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| El Arte De Llorar A Coro
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| por Francisco Contreras Gil
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Es una novela dura, con un argumento diferente, que le llevará, como si de una montaña rusa de emociones se tratara, de la risa al llanto. Sus páginas destilan una historia aterradora a la par que tierna que hace que estemos ante un libro cuya lectura es difícil de abandonar cuando ya se ha empezado...
El arte de llorar a coro, rubicado por Erling Jepsen, con traducción de Blanca Ortiz, y publicado por Ediciones Lengua de Trapo, nos muestra como la vida no es fácil para Allan, el joven protagonista de la novela. A sus once años debe hacer uso de toda su astucia para que su padre esté contento, ya que sólo así la familia permanecerá unida aunque, lo que más feliz hace a su padre, es recitar discursos en los funerales; sus emotivas intervenciones arrancan las lágrimas de todos los asistentes.
Allan, con la ayuda de sus dos protectoras, Tarzán y san Gabriel, asume la responsabilidad de conseguir que los famosos panegíricos vuelvan a escucharse: la pérdida de un hombre es la ganancia de otro. Pero todo se complica aún más cuando su hermana mayor, Sanne, ya no quiere pasar la noches con su padre...
Jepsen -escritor teatral y Premio de la Juventud del Festival de Cine de San Sebastián en 2006 por la adaptación cinematográfica de este trabajo- se vale de la ingenuidad y al mismo tiempo perturbadora mirada de un niño para convertir a lo largo doscientas cincuenta y dos páginas una dramática historia familiar en una comedia negra ambientada a finales de la década de los años setenta en un pequeño pueblo danés.
Un relato que conmueve a la vez que desmonta con habilidad tópicos del costumbrismo y la presunta inocencia de la infancia.
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