| A lo largo de la historia hemos podido observar que las expresiones sexuales son tan diversas como las personas y los gustos. Cada individuo es un mundo y desarrollamos nuestros particulares matices, ritmos y preferencias a la hora de desenvolvernos en el sexo. Cada uno, por tanto, buscamos y expresamos nuestras conductas y contactos sexuales.
En los años 60 aproximadamente aparece la llamada revolución sexual, con la cual la sexualidad humana adquirió un nuevo significado y se acepta ya como un instinto natural que debe ser entendido en todas sus dimensiones y desde un prisma de igualdad entre el hombre y la mujer.
Tradicionalmente se inculcaba la idea de que en el sexo existía una forma como debe ser, un ideal de expresión sexual cuya prioridad era como norma una expresión de conducta heterosexual, coital y con fines meramente reproductivos.
Lo que era considerado normal o anormal estaba influenciado por la cultura, las costumbres, la moral, las religiones, el país… y variaba con el paso del tiempo.
Según los estudios psicológicos, médicos y sexológicos, cada persona tiene sus propios gustos a la hora de realizar la conducta sexual, sus deseos y preferencias, sus fantasías, etc. Así pues ninguna conducta o fantasía es perjudicial si respeta el deseo, la libertad y la integridad de las personas con quien se relaciona, y si no es vivida o experimentada como una tensión o angustia.
A la hora de buscar cada persona su forma de expresarse sexualmente, de sentir su placer sin límites, se va conociendo sin poner obstáculos ni trabas que le permitan sentir a su modo su sexualidad. Si interponemos etiquetas a determinadas conductas sexuales esto influirá negativamente en la persona acarreándole un desarrollo sexual negativo.
La sexualidad no se goza de una única manera, existen diferencias técnicas y variaciones en la conducta sexual que implican conocer el propio cuerpo y proporcionarle placer. Es pues, igualmente, muy importante la comunicación con aquella persona con quien se comparten las experiencias sexuales para saber lo que agrada a cada uno.
Voy a permitirme explicar un poco en qué consisten las técnicas más empleadas por las personas para expresar su placer sexual, teniendo en cuenta que cada uno tiene sus preferencias, formas de realizarlas, gustos, etc.
En primer lugar la masturbación es la actividad que primero aparece y que consiste en proporcionarse placer mediante la estimulación física directa que uno mismo se produce; independientemente del resultado y del modo en que lo haga; no es necesario que se llegue al orgasmo.
Los prejuicios sobre la masturbación, la religión y los mitos han hecho que se hable poco de ella y que se perciba como un tabú aún, llegando a negarse su realización por parte de algunas personas.
Actualmente no se considera tanto una conducta sexual inapropiada sino que se percibe como una expresión normal del sexo humano que resulta beneficiosa para conocerse y disfrutar del placer, incluso libera tensiones.
Los besos también son importantes en la conducta sexual; el beso es la primera expresión de afecto que experimentamos y sabemos desde pequeños que muestran sentimiento. Es el primer contacto erótico que sirve como preámbulo a otras conductas sexuales. Tienen una carga erótica o son símbolo de cariño.
Las caricias son otra forma de expresar afecto y ternura. La piel tiene muchas terminaciones nerviosas que al ser estimuladas proporcionan cierto placer. El tacto puede provocar un aumento del deseo, dando cierta intimidad y confianza, llegando a experimentarlo por todo el cuerpo y a disfrutar de éste.
El coito anal es una practica que está cobrando fama en nuestros nuevos gustos en lo referente a relaciones sexuales, consiste en la introducción del pene en el ano, tanto en relaciones hetero como homosexuales.
Tradicionalmente era considerado como antinatural, vicioso y pecaminoso debido a algunas religiones que prohíben todo aquello cuyos fines no sean reproductivos. Actualmente es una variante más del juego sexual. El ano, igual que la vagina, tiene infinitas terminaciones nerviosas muy sensibles y su penetración supone estimular gran parte del cuerpo.
A la hora de realizar esta penetración se debe tener en cuenta que el tejido del recto es muy fino y delicado y puede fácilmente desgarrarse, llegando a introducir diversos microbios y virus de transmisión sexual. Se recomienda siempre usar el preservativo durante toda la penetración anal. También hay que tener en cuenta que el ano es un esfínter muscular y como tal tiende a ofrecer resistencia por lo que debe haber una relajación previa. Hay que tener en cuenta que no lubrica como la vagina por lo que se debe usar una crema lubricante que no irrite; así, se debe comenzar la penetración de manera paulatina y cuidadosa incluso dilatando primero el ano con la estimulación manual.
Nunca debe pasarse del coito anal al vaginal directamente sino que debe lavarse antes el pene y cambiar de preservativo.
El sexo oral es otra variante muy usada en la actualidad que consiste en la estimulación de los genitales mediante la lengua, los labios y la boca.
La estimulación de los genitales femeninos es el cunnilingus, y la estimulación de los genitales masculinos se conoce como fellatio o felación. Ambos pueden usarse de manera individual o en pareja adoptando la postura conocida como 69 que es invertida por parte de los dos participantes. Puede realizarse de diversas maneras pero es la boca la que proporciona el placer. Tener en cuenta que la boca al estar húmeda y ser cálida proporciona mayor grado de placer por ambas partes.
Por último el coito vaginal es la actividad sexual que consiste en la penetración del pene en la vagina como medio para conseguir placer sexual. Lo importante es conocer cada uno su propio cuerpo y el de la pareja y saber lo que nos proporciona placer a cada uno. Muy aconsejable también siempre usar preservativo como medio preventivo de embarazos no deseados y de enfermedades de transmisión sexual.
Existen muchas posturas a la hora de realizar el coito, dependiendo del gusto de cada persona está la variedad. Lo importante es provocarse el mayor placer por parte de ambos y poder irse conociendo más cada vez que lo practiquen.
Ni que decir tiene que sobre todo máxima importancia en el uso de preservativo para evitar contagios sobre todo en las relaciones esporádicas que cada vez los jóvenes practican antes y con mas personas. | |
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