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| De La Olla Al Mole
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| por Francisco J. Vázquez
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En más ocasiones de las que podemos imaginar muchos libros interesantes pasan desapercibidos para la mayor parte de los lectores, simplemente porque no son publicados bajo un sello editorial con un importante volumen publicitario detrás. Y se tiene la errónea concepción de que si no se publica bajo editoriales "conocidas", el libro no nos va a gustar.
Nada más falso que esa suposición. Uno de esos libros interesantes y que sorprenden por su contenido es sin lugar a dudas el libro de Xavier Domingo titulado "De La Olla Al Mole", editado por BmmC Editores. Un ensayo sobre la cocina, tal y como lo definió el autor, donde nos hace partícipes de la importancia de la comida antes y después del descubrimiento de América, y del cambio de costumbres, mentalidad y filosofía que ello conllevó tanto para los europeos como para los habitantes oriundos de aquellas tierras.
A primera vista podríamos pensar que se trata de un libro gastronómico. Pero nada más lejos de la realidad. La gastronomía es aquí tan sólo el nexo de unión que engrana los conocimientos e indagaciones que el autor tuvo que realizar sobre antropología, historia, psicología, filosofía y un sinfín de las más diversas ramas de humanidades que se dan cita en dicho ensayo. Un ensayo cuyo único objetivo es resaltar la importancia (que la tiene y mucha, como verán si leen el libro), de las costumbres culinarias en la vida del hombre. Unas costumbres casi siempre olvidadas y que son fuente no sólo de rica información, sino en más de una ocasión del éxito o el fracaso emprendido lejos de las cercanías y entornos de aquellos que se aventuran a realizar cualquier empresa.
Y es que particularmente curiosos son las referencias, por ejemplo, a la visión de las cocinas de los Reyes Católicos antes del descubrimiento (sorprende sobre todo la pobreza de los supuestos manjares reales que siempre todos hemos tenido en mente). También resulta de lo más llamativo el capítulo dedicado a la antropofagia de la que determinadas culturas hacían gala, sobre todo, resulta interesante ver y observar como aquellos que se veían inmersos en prácticas caníbales narraban los horrores de unas prácticas tan incomprensibles para los occidentales de esa época.
Mención aparte cabe hacer sobre el hecho que provocó el choque de la aparición de nuevos productos (hortalizas, frutas, carnes y pescados de las nuevas tierras descubiertas) en los europeos allí desplazados, que originaron un desconcierto sin precedentes en aquélla "nueva despensa" que se abría ante sus ojos. Desconcierto que, también hay que decirlo, se debía no sólo a la forma y gusto de los nuevos alimentos, sino también al peligro de algunos de ellos, que en según que condiciones podían resultar el más delicioso manjar, y al mismo tiempo el más peligroso de los venenos.
"De La Olla Al Mole" es un libro para disfrutar. El conocimiento de la historia es un hecho que todos deberíamos conocer, pero cómo se llegó a ello (entre otras cosas por la comida), tampoco debería pasarnos desapercibido. Si tenéis la oportunidad, no dudéis en leerlo. Os va a sorprender, y mucho.
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